Después de 30 años sin servicio, la Primera Confitería volvió a abrir sus puertas. El acto de inauguración contó con la presencia del jefe de gabinete, Juan Manzur, el gobernador Osvaldo Jaldo, el presidente del Ente Tucumán Turismo, Sebastián Giobellina, Unión Hotelera y Gastronómica de Tucumán, Ernesto Gettar, y Carolina Vani representante de la Firma Bicentenario; Marina Sánchez, en representación del Tucumán Bureau, entre otros.
Giobellina remarcó que el espacio forma parte del circuito de Las Yungas: “desde Horco Molle uno sube y encuentra un parque aéreo, ahora está la Primera Confitería, y más adelante se realizan obras en El Rulo para dejarlo como nuevo.”
Inaugurada en 1938, la Primera Confitería se convirtió en Patrimonio Cultural, siendo un ejemplo icónico de la arquitectura de la época, pero que luego fue abandonada, deteriorando las instalaciones.
La renovación del casco estilo neo californiano funcionará como restaurante, salón de fiestas y evento. De esta forma, la nueva Confitería se convierte en un socio del Bureau. “Buscamos producir junto a Carolina Vani nuevos eventos relevantes en nuestra provincia”, dice Marina Sánchez.
